lunes, 28 de diciembre de 2009

Ventana

A través de la ventanilla del tren percibo la realidad como si la penetrara por un inmenso, inacabable túnel. Es un túnel a través del tejido esencial de la vida... miro por la ventana, y deseo no llegar nunca, seguir viajando por ese túnel a través del mundo.

domingo, 27 de diciembre de 2009

Santidad


uno, dos, tres... vacío, oscuridad.... palabras.... piedra, mano, pluma...

descubrimiento, niñez... madre... no... padre... ser... elemento....

desnudo, amor, sexo, pasión....

escrito, pensado o tal vez sólo hilvanado... no más que confusión...

ternura... es posible que de nuevo amor pero tal vez incierto y no seguro....

blanco, negro pero también gris.... el azul no cabe...

emoción, silencio.... sí, sólo silencio...

Fe, Milagros y Gracias

Fe

Entró a tiempo de escuchar el sermón. No tenía previsto ir a ninguna iglesia, de hecho, ninguno de sus pasos era meditado, su camino errático, únicamente escogido por cualquier motivo igual de intrascendente, en este caso el deseo de seguir a una joven monja solitaria, con una inopinada sonrisa dibujándose apenas en su rostro, pero lo suficiente como para llamar su atención. Se sentó unos cuantos bancos detrás de la monja ya que el banco inmediatamente contiguo a ella estaba ocupado por una joven obesa, desmadejada, medrosa, incapaz de fijar su atención en nada... y lo más curioso es que no le resultaba desconocida aunque no conseguía ubicarla. No había demasiada gente en la iglesia, cuerpos separados, esparcidos al azar... Le llamó la atención las velas en una de las capillas laterales. ¿Peticiones, agradecimientos por alguna gracia o favor concedidos o simple devoción? Él tenía también sus peticiones, sus deseos... incluso sus motivos para dar gracias, pero le faltaba la fe. Se preguntó si realmente era la fe lo que mantenía a toda esa gente allí reunida, o si algunos como él o la joven obesa, que en ese momento ya se había cambiado de banco, incapaz de mantener la quietud requerida, habían entrado como él buscando una fe que no tenían. Miró de nuevo las velas encendidas, se giró y se marchó deseando que hubiera una razón para seguir escuchando las palabras del cura. No la encontró y al poco volvía a estar en la calle rodeado de multitudes sin fe, como él.


Milagros

Cuando perdemos la fe en lo cotidiano sólo nos queda creer en los milagros...


Gracias





Soledad (II)


sábado, 26 de diciembre de 2009

Borrador de lo que tal vez sea pero aún no es...



De qué somos el reflejo? de quién la mentira?

Estoy aquí, sea el lugar que sea, pues al final todos los lugares son el mismo, nuestros ojos, nuestra mente, vivimos encerrados en nosotros mismos, somos nuestra cárcel y no lo sabemos... Quienes somos?

Cómo saber que el mundo es real y no es una invención nuestra... ?


y resulta gratuito suponer la existencia de una sustancia real que sustente las propiedades de los cuerpos...


nada importa... todo es fugaz... sólo es un tránsito de la nada hacia la nada... del no ser hacia el no ser... yo no fui y tampoco seré... es importante ser feliz? es importante ser algo?

por qué nos comportamos como si fuéramos eternos cuando no somos más que una gota que se desliza por el cristal de una ventana... a veces más deprisa, otras veces más despacio... pero siempre como una lágrima a punto de secarse...



viernes, 11 de diciembre de 2009

Carne


Brillante superficie, mano que se pierde en la soledad purpura,

observo atentamente mi destino,

el tiempo no espera a que tú y yo

desnudemos de nuevo nuestros cuerpos al frío.

Los besos cargados de herrumbre se pierden sin fin,

las caricias se aplastan en nuestra piel

penetrando su esencia.

Zen


el tiempo detenido,

el estanque se agita al movimiento de las carpas.

miradas inmóviles,

movimientos imperceptibles,

y yo, por fin, ausente de mi mismo...