domingo, 6 de febrero de 2011

Todo son luces y sombras


Todo es un juego de reflejos, de luces, de sombras que se reflejan en el brillo de las luces en los breves charcos que deja una llovizna fina, agua casi invisible en la fría noche. Tal vez todo debería ser un túnel iluminado, un viaje sin fin desde la nada hasta el vacío, pero nos resistimos, no queremos plegarnos a la exigencia de la realidad. Creemos en el poder de la fe, de la fuerza de la voluntad, de la flexibilidad del destino y en el fondo somos como peces de colores que no ven qué hay más allá de la pecera, nos deslumbramos con el trampantojo... pero el brillo está ahí y, al final, los ojos se llenan de luz y la lluvia parece un poema que se derrama lánguido, verso a verso sobre nuestras cabezas...